EL COACH | La polémica decisión de Michael Jordan de jugar béisbol fue la más acertada e importante de su vida

El regreso de Michael Jordan a la escena deportiva gracias al documental The Last Dance ha revivido un sinfín de sentimientos en muchos de sus fanáticos, que se preguntan por qué el mejor jugador de la historia de la NBA decidió quitarse la corona en 1994, justo en la cima de su carrera, para jugar béisbol con los Medias Blancas de Chicago, a nivel de Doble A.

Un reporte reciente de Anthony Castrovince, de MLB.com, asegura que la decisión aún permanece como un enigma entre muchos de los más llegados a Jordan, mientras que otros dicen que se debió a una promesa que le hizo a su padre, recién fallecido para entonces y cuya muerte cambió por completo la perspectiva de la vida de "Su Majestad".

Ver a Jordan jugar béisbol, inclusive en estos momentos, puede resultar bizarro. Sin embargo, este break que se tomó Jordan de la NBA fue necesario y casi imperativo para él. Y es que el béisbol es como la vida misma; es el deporte que te enseña y te entrena a tener paciencia, humildad, afina tu nivel estratégico, al tiempo que te ayuda a reconocer el esfuerzo que hacen tus pares y rivales para subir entre categorías para cumplir un sueño: llegar a las Grandes Ligas. Este viaje, para la mayoría que lo transitan, es muy largo, casi imposible; y Jordan aprendió todo eso en un año.

De hecho, la leyenda de los Chicago Bulls se reportó a los entrenamientos primaverales en el 2015, pero la disputa legar entre propietarios y jugadores de la MLB lo obligó a volver a la NBA.

Jordan dejó average de 202, se ponchó 114 veces y cometió 11 errores en su primera incursión en la pelota. Además se robó 30 bases y empujó 51 carreras. No obstante, más allá de sus números, Jordan tenía que alejarse del baloncesto. Él, según contó en más de una ocasión, necesitaba una distracción tras la muerte de su padre, además de alejarse de lo que significaba ser el mejor jugador de la NBA. Jordan sintió el peso de la corona en un momento delicado, cansándose de los halagos y hasta de su propio ego, el cual lo hizo perder su humildad.

“Me di cuenta que había perdido algo importante por todo lo que me estaba pasando en el baloncesto. Estuve en un pedestal por tanto tiempo que me olvidé de los pasos que había tenido que dar para llegar allí. Eso fue lo que me enseñó el béisbol", aseguró Jordan en su regreso a la NBA.

""Estuve en un pedestal por tanto tiempo que me olvidé de los pasos que había tenido que dar para llegar allí. Eso fue lo que me enseñó el béisbol"."

- Michael Jordan

Ver a Jordan jugar béisbol nunca será normal. Siempre será algo atípico; raro. Pero nadie podrá decir que fue un error. En un año Jordan aprendió más jugando béisbol acerca del esfuerzo y la humildad en el deporte que en sus 9 años anteriores en la NBA.

No en vano, Phil Jackson, entrenador de los Bulls para entonces, dijo que el Jordan que regresó a la NBA en 1995 era muy diferente al de 1993; uno más humilde, generoso y maduro.

Qué bueno que jugaste béisbol, Michael. Qué jamás te digan que fue un error.