EL COACH | El COVID-19 en los Marlins de Miami podría ser el principio del fin de la MLB en 2020

Este domingo la MLB prendió sus alarmas y su mayor miedo se hizo realidad. Un total de 14 personas, entre jugadores y coaches, dieron positivo al virus COVID-19 en los Marlins de Miami, equipo que podría convertirse en el epicentro de la epidemia en las Grandes Ligas.

El juego de este lunes entre los Marlins y los Orioles de Baltimore fue suspendido y ya el resto de los equipos empiezan a sacar sus cuentas y tomar todas las medidas sanitarias posibles para evitar que el coronavirus llegue a sus filas. La temporada está en jaque, y para la Major League Baseball es imperante armar un plan alternativo al de la temporada de 60 partidos por si la pandemia se esparce por el resto de las organizaciones.

Lo que ocurrió en los Marlins tiene que ser visto desde varias perspectivas. La primera es velar por la salud de los infectados, colocarlos en cuarentena y ver de qué manera pueden los peces seguir en carrera con la etiqueta del COVID-19 en la espalda. La otra es hacer de este hecho un punto de inflexión en la liga, que tiene que investigar qué ocurrió en la organización de Derek Jeter para alertar a las demás.

Los Yankees, por su parte, no jugarán su partido de este lunes con los Filis de Filadelfia, equipo que se midió a los Marlins el fin de semana. Ningún jugador está dispuesto a arriesgar su salud y la de los suyos, por lo que la cancelación de partidos puede tomar un efecto dominó de terror para la MLB.

La MLB tiene que verse en el espejo de la NBA, liga que logró conjugar a la mayoría de sus equipos en una especie de burbuja en Orlando para disputar la recta final de la temporada regular y los playoffs. El no tener que viajar con regularidad y tener bajo control a sus activos dentro de un mismo lugar será clave para que la NBA vuelva a consagrarse como la mejor liga de Estados Unidos en materia de organización, sobre todo en estos tiempos.

Las MLB no cometió ningún error en pensar en que sus protocolos de seguridad sanitaria funcionarían, dejando que los equipos jugaran en sus estadios sin público, no obstante, quizás pecó de ingenua al pensar que el virus podía ser erradicado sólo con evitar el contacto entre los peloteros, evitar que escupan o colocarse alcohol en las manos.

Hasta que no haya una vacuna que permita que el mundo vuelva a la normalidad ninguna liga deportiva del mundo podrá evitar el contagio de sus activos. Ya pasó en la segunda división de la liga española de fútbol con el Fuenlabrada, cuyos 18 positivos por COVID-19 desvirtuaron la competición. Es imposible asegurar la erradicación del coronavirus y en base a esta premisa las ligas deben armar un plan.

Si la MLB puede finalizar su temporada de 60 partidos, jugar los playoffs y ver festejar al campeón de la Serie mundial será un milagro. Recemos porque la situación de los Marlins no se haga contagiosa y podamos seguir disfrutando del béisbol, parte esencial en la economía de Estados Unidos.